Que tu palabra plasme como el Sol
cada día, por siempre, en mi camino,
y a su luz haga en mí crecer su fruto.
Sea ella, Santo mío, el buen crisol
cuyo fuego te ofrezca amor contino;
sea siempre este amor total tributo.
cada día, por siempre, en mi camino,
y a su luz haga en mí crecer su fruto.
Sea ella, Santo mío, el buen crisol
cuyo fuego te ofrezca amor contino;
sea siempre este amor total tributo.
1/11/94